Júlia Filbà
Business Unit Director / Member of the Mgmt. Board
IMPAG IBERIA, S.L.
La demanda de alimentos naturales, sanos y respetuosos con el medio ambiente aumenta constantemente. Los consumidores valoran cada vez más los productos que contienen menos ingredientes, son sabrosos y se producen de forma sostenible y transparente.
Nuestra nueva cooperación hace posible ofrecer una gama más amplia de soluciones de sabor que se adaptan específicamente a las preferencias y necesidades de los consumidores modernos:
Los productos de MFL se basan en una tecnología patentada de fermentación en estado sólido que produce soluciones ricas en sabor a partir de legumbres, cereales y flujos secundarios. Estos procesos permiten producir concentrados complejos, ricos en umami y de sabor intenso sin utilizar aditivos ni aromatizantes. Los productos se etiquetan en función de los materiales de origen; por ejemplo, como garbanzos fermentados, semillas de girasol fermentadas o trigo sarraceno fermentado. Los fermentados pueden combinarse como bloques de construcción, lo que permite crear soluciones personalizadas.
En el frenético mundo moderno, los productos precocinados son más demandados que nunca. Prácticos y rápidos de preparar, con las soluciones MFL se puede crear un perfil de sabor de «cocción larga» o «cocción lenta» en poco tiempo. El perfil de sabor «casero» combinado con la facilidad de uso de los productos MFL resulta convincente en platos preparados como lasaña, canalones y croquetas, por ejemplo.
Las soluciones aromatizantes MFL son ideales para productos cárnicos y alternativos, como hamburguesas, albóndigas y nuggets. Ofrecen una forma natural de aumentar la complejidad del sabor y, en particular, de compensar la falta de plenitud de sabor que suele producirse cuando se utilizan proteínas y grasas vegetales. El aumento del umami permite reducir el contenido de sal en esta categoría de productos, normalmente muy salados, sin sacrificar el sabor.
Además de los platos muy condimentados, los fermentados más ligeros también son ideales para sopas y salsas más suaves. Estos platos también se benefician de la nueva dimensión del sabor, como han demostrado las catas a ciegas. De este modo, se pueden reducir los costosos extractos de carne o glutamato. Algunos ejemplos de posibles aplicaciones son las salsas gravy, bechamel y las sopas de cebolla.
Los fermentados de MFL aumentan la complejidad del sabor, potencian el umami y proporcionan un agradable sabor con cuerpo. Gracias a su alto grado de naturalidad, la etiqueta limpia, la corta lista de ingredientes, el sabor «casero» y la opción de reducir la sal, los productos responden a muchas tendencias al mismo tiempo. Las numerosas variaciones del producto permiten utilizarlos en todas las categorías de alimentos.
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